Keep calm… & wait!

Wait… esperar… qué palabra extraña, casi excluida de nuestro vocabulario personal. Claro, porque esperar requiere esfuerzo, constancia y sobre todo implica un tiempo que muchas veces es indefinido pero que, nos guste o no, debe seguir su curso pues al tiempo no podemos dominarlo.

Esperar la “persona correcta” para iniciar una relación y un futuro matrimonio, en algunos casos, parece ser una de las esperas más largas de la vida. Cuando decidimos vivir de acuerdo a sanos principios de pureza debemos pensar que la característica más importante que debe desarrollarse en nosotros es saber esperar. En realidad no existe la “persona correcta” porque nunca nadie será perfectamente adecuado para una persona (la media naranja desafortunadamente no existe) pero seguramente es bueno distinguir lo que podría ser “bueno” para nosotros de lo que en cambio resulta ser “lo mejor” para nosotros. Es una línea muy delgada pero hay una gran diferencia. ¿Cómo hago para distinguir entre lo bueno y lo mejor? Lo bueno frecuentemente es una copia de lo mejor, por eso no es fácil diferenciarlos. Es como tener al frente por ejemplo unos tenis Adidas, solo que unos son originales y los otros no lo son. Tal vez al no saberlo te cuesta reconocer los originales de los otros al inicio; tal vez si te los pruebas los que son imitación se sienten bien, pero si después observas detenidamente los dos pares eres capaz de reconocer los originales de los que no lo son. Lo mejor lo reconoces no tanto porque se acerque a tus expectativas sino porque va más allá de éstas, generalmente revolucionándolas.

A menudo sucede que lo bueno nos gusta tanto que nos cuesta decir que no, especialmente porque de nuevo entra en juego la espera y el no saber cuánto sea larga esa espera, pero una cosa es cierta: la espera será recompensada. Es un concepto que para muchos resulta incomprensible, tal vez anticuado y no de moda, no adecuado a las tendencias del momento, pero la realidad es que de hecho la espera es una ocasión extraordinaria para el crecimiento personal porque es precisamente en este tiempo en el que aprendemos a conocernos más profundamente y a entender, además de la visión en común y los valores, cuáles son las demás características importantes que buscamos en la persona que estará a nuestro lado.

Cada uno de nosotros busca características específicas en una persona que pueden ser caracteriales o estilos de vida que se alinean al nuestro y es importante conocerlas y saberlas distinguir porque se tendrán que reconocer de algún modo en la persona con la que pasaremos el resto de la vida, pues el “hasta que la muerte los separe” es un periodo bastante largo, por eso es bueno tener una visión clara para ir por el mismo camino. Cada estación tiene su fruto así como la estación de la espera tiene los suyos y es bueno experimentarlos ya que nos sirven para nuestro crecimiento en ese preciso momento.

Por lo tanto, si te encuentras precisamente en ese momento de la vida te invito a experimentar una espera fructífera y no una estancada. Prepárate para lo mejor que está por venir y no te aflijas pensando en cuándo llegará.

Ya hay dones establecidos y preparados para tu vida que esperan solo que los tiempos para recibirlos maduren. Keep Calm y cree. Keep Calm & Wait.

Artículo de Francesca // Redacción Purex
Traducido por Julián // Purex en Español